New year my ass.

Y la noche se vuelve un objeto líquido
y todo es una continuación de alguna cosa ya existida,
de un pasado ya derramado sobre el mantel.

Las cosas en la vida vienen de a tres.

Y el aire entra en los ojos y lastima.
Y la vigilia para qué, para qué mantener abiertos los párpados ante un mundo que no puedo comprender,
ante una vida que me mira desde lejos, que no poseo.

Mi perro respira agitado en el piso.
Y yo intento mantener un silencio cuando realmente no hay nada para decir.
Mi perro se levanta y se va.
Realmente.
Son las 4 de la mañana y estoy sola, y no sé cómo estar sola, no sé como mirar mis manos tipear y sentir que son mías, no sé cómo leer esto que escribo y saber que proviene de mí y no de un cáliz amargo, de un envase herméticamente cerrado in- and out-.

No hay nada que penetre aquí. (Es todo piel y honestidad).